El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica las declaraciones de bienes de los altos cargos de
la Administración, así como las de los de los anteriores gobiernos del Partido
Popular, que se publicaron por última vez en septiembre de 2014. Ver noticia en El Mundo
Carlos Yebra Matiaci. Blog. Con fecha 29 de septiembre de 2018, se ha publicado en el
Boletín Oficial del Estado, Real
Decreto 1208/2018, de 28 de septiembre, por el que se aprueba el Reglamento
por el que se desarrollan los títulos Preliminar, II y III de la Ley 3/2015, de
30 de marzo, reguladora del ejercicio del alto cargo de la Administración
General del Estado.
Primer Gobierno de Pedro Sánchez. 2018. PSOE |
Pues bien, ahora el gobierno de Pedro Sánchez desarrolla
los títulos preliminares II y III de la Ley
3/2015, de 30 de marzo, reguladora del ejercicio del alto cargo de la
Administración General del Estado, aprobando un reglamento en donde se
desarrolla cuáles son los cargos asimilados a los que se refiere el título
preliminar de la citada Ley 3/2015, los procedimientos para que la Oficina de Conflicto de Intereses tenga conocimiento
de los nombramientos en puestos de altos cargos en organismos y entidades del
sector público, la documentación que ha de recibir, y las disposiciones comunes
al registro de actividades, bienes y derechos patrimoniales de los altos
cargos.
Además, mediante Resolución de
26 de septiembre de 2018, de la Secretaría de Estado de Función Pública, por la
que se da cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 21.5 de la Ley 3/2015, se
dispone la publicación de las declaraciones comprensivas de la situación
patrimonial de los altos cargos nombrados y cesados desde el 1 de julio de
2014 hasta el 26 de julio de 2018, información que el gobierno de Mariano Rajoy
estuvo ocultando a la ciudadanía, incumpliendo así lo establecido en la Ley
3/2015, escudándose en la falta de desarrollo de un reglamento que jamás tuvo
la intención de aprobar.
Relación de altos cargos nombrados y cesados
Como suele decirse, más vale tarde que nunca. La información
que ahora es pública, consta de los datos personales (nombre, apellidos y
cargo), activos (bienes inmuebles según valor catastral y valor total de otros
bienes) y pasivos (créditos, préstamos, deudas, etc.) de los altos cargos
cesados y nombrados.
A la vista de la información publicada, difícilmente se
podrá determinar si existe o no un enriquecimiento ilícito o si existen
conflictos de intereses, ya que el extracto es sumamente escueto, a pesar de las 715
páginas de las que consta. Lo que sí se puede deducir, es la inmensa cantidad
de altos cargos nombrados y cesados en los últimos 4 años, lo que viene a
confirmar la politización de la Administración General del Estado y la
necesidad de una regulación seria de la figura del directivo público contra los
nombramientos a dedo y los ceses arbitrarios.
En este sentido, Fedeca elaboró una propuesta de Estatuto de Directivo
Público que garantice la independencia de los intereses políticos y
despolitizar las Administraciones Públicas. Por su parte, Eva Belmonte en CIVIO, se hace eco y denuncia que el gobierno sigue
ocultando dónde tienen acciones los altos cargos de la Administración General
del Estado, datos que sí aparecen en otras declaraciones de bienes publicadas
por algunas Comunidades Autónomas y el Congreso de los Diputados.
Esto es lo que hay. ¿Menos es más? ¿Tenemos que
conformarnos con estas migajas? Pienso que no. La figura del alto cargo en la
Administración General del Estado debería ser un referente en cuanto a la
transparencia y la publicidad de sus bienes, así como de sus actuaciones
públicas y privadas en el ejercicio de su cargo.
¿Tanto tienen que ocultar? Esto no es digno de un país
que aspira a ser cada vez más avanzado y moderno. Sinceramente, estamos muy
lejos de otros países democráticos, pero al menos el gobierno de Pedro Sánchez
ha dado un primer paso aprobando este reglamento, que el gobierno de Mariano
Rajoy se negaba a hacer realidad saltándose así la propia Ley, esa de la que
tanto siguen haciendo gala y exigiendo el cumplimiento a los demás, que no a
ellos mismos.
Rajoy ya no está, ahora votarán a Casado. O a Rivera.
Estoy convencido de que se hará realidad el refrán que dice “otro vendrá
que bueno me hará”. Hasta te echaremos de menos Mariano.
O no…
No hay comentarios:
Publicar un comentario