Por ANTONIO ARIAS RODRIGUEZ. Fiscalización.es blog.-.Hace un lustro, el Consello de contas de Galicia asumió nuevas funciones de prevención de la corrupción, mediante la creación de una sección específica de la Institución de Control Externo del sector público gallego. Hoy traemos a la bitácora dos magníficas aportaciones en éste área, que son un ejemplo dentro del mundo de la fiscalización de los fondos públicos.
Por una parte, se acaba de publicar la a convocatoria de la segunda edición del “Premio Carlos G. Otero Díaz”. Se trata de incentivar la investigación sobre prevención de la corrupción, en el marco de las nuevas competencias citadas y de recordar a quien fue el primer presidente del Consello, toda una personalidad dentro del mundo académico, político y profesional del control. La anterior edición reconoció el trabajo de José Antonio Fernández Ajenjo que será publicado junto con otras aportaciones doctrinales en el libro conmemorativo que ya tiene en marcha el Consello de contas.
Podrán concurrir al premio los autores o coautores de trabajos de investigación, que tengan su domicilio en cualquiera de los Estados miembros de la Unión Europea, que podrán tener la condición de persona física o grupo de investigación, compuesto por personas físicas, bajo la coordinación de uno de sus integrantes, que actuará como representante del grupo y responsable del trabajo a los efectos oportunos.
Se establece que el plazo de presentación de las solicitudes hasta el 31 de octubre de 2021. Su dotación económica es de 4.500 euros, distribuidos de la siguiente forma: Primer premio: 3.000 euros, Segundo premio: 1.500 euros, con tres posibles accésits de 1.000 euros cada uno.
Por otra parte, para cumplir con las nuevas exigencias de control, en 2018 se firmó un protocolo de colaboración entre la Xunta y el Consello para la implantación y seguimiento de planes de prevención de riesgos de la corrupción en el sector público autonómico de Galicia.
Incluye también la “propagación de una cultura de la transparencia y comportamiento ético en los sectores público y privado, así como en la difusión de conceptos esenciales en materia de control interno, administración de riesgos y fomento de la integridad institucional”. Una colaboración proactiva para establecer políticas de integridad institucional y contar con un programa de prevención de riesgos de corrupción que establezca su identificación y valoración así como de medidas correctivas para su tratamiento.
Primeros pasos para el diagnóstico
La semana pasada, la Xunta de Galicia aprobó una serie de medidas en ese nuevo marco preventivo donde se recogen muchas de las recomendaciones del Informe de diagnóstico del Consello de Contas de Galicia sobre los sistemas de control interno y gestión de riesgos de corrupción en la Administración autonómica. El citado diagnóstico es un útil estudio que no ha tenido el relieve que merece y que contiene el análisis y valoración global y pormenorizada de las debilidades y posibles mejoras. Incorporaba una estrategia a seguir para la implantación paulatina del modelo en base a los resultados del diagnóstico, así como las recomendaciones dirigidas a la Administración y al Parlamento autonómico de las medidas más básicas y prioritarias para avanzar en esa implantación y mejorar la percepción ciudadana de la corrupción institucional.
Pues bien, en el documento aprobado el 27 de mayo pasado, la Xunta se compromete a desarrollar entre el año 2021 y el año 2024, un total de 24 medidas, englobadas en seis ejes de actuación.
Eje 1: Cultura institucional
Eje 2: Ética institucional
Eje 3: Recursos humanos y compromiso con la competencia profesional
Eje 4: Planes de prevención y gestión de riesgos de gestión
Eje 5: Consolidación de la administración digital
Eje 6: Calidad normativa
En definitiva, avances concretos y compromisos en la mejora continua en la prevención de la corrupción que demuestra la eficacia (y economía) del modelo atlántico en la amplia tarea de las Instituciones de Control Externo frente al fraude.
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